Recordatorio

No somos profesionales, simplemente nos gusta leer y tenemos tiempo libre, así que a veces cometemos errores.

martes, 28 de febrero de 2017

El telón de fondo: reflexiones sobre la lectura, el mensaje y la narración

Lyra, al contrario que una parte de la ciencia ficción pesimista, tiene fe en la humanidad. Puede que ahora esté cansada de hijastros caprichosos que me andan buscando para que desempeñe mi trabajo de hada madrina, pero la mayor parte de mi vida se ha dedicado (y se dedicará) a creer en los individuos.


Quizá por eso he sido yo, entre una dragona glotona y una bruja indocumentada, quien ideara esta entrada sobre la capacidad de la literatura para mostrar lo mejor y lo peor de nosotros mismos. Hoy os quiero hablar un poco de todo, sobre lo que leemos, lo que escribimos y cómo lo hacemos.

Tendréis que ser pacientes porque no es fácil hilar todos estos temas y espero que se me entienda.

miércoles, 22 de febrero de 2017

Ciencia Ficción: Viajes por el Tiempo y el Espacio







¿Cuántas lunas hacía que no escribía un artículo para la Mazmorra?

En mi defensa os diré que tengo las patas y las garras muy grandes y es difícil escribir en el teclado de Rika, no es culpa mía. ¿No? Je, bueno. Espero que después de haberos acostumbrado a los artículos de una bruja disculpéis la no tan profunda sabiduría de esta dragona. Como diría Rika…


¡Bienvenidos a la Mazmorra! ¡Green a vuestro servicio!

Hace mucho tiempo vi una película que se llama Otra Tierra. Recuerdo que, hace aún más tiempo, vi el trailer y me interesó muchísimo su argumento. Giraba en torno a la aparición repentina y misteriosa de un duplicado de la Tierra junto a nuestro propio planeta. No se exploraban las consecuencias físicas de dicha aparición, no se hablaba de cambios en las mareas o la gravedad o el campo electromagnético (habría dado para otra película entera). De lo que sí se hablaba y especulaba era sobre el impacto emocional y espiritual, sobre si esa era una copia real de la Tierra, si existían duplicados exactos de las mismas cosas, de las mismas personas. Nunca se ve cómo se viaja a esa otra Tierra, nunca vemos la nave espacial, si hubo o no problemas para llegar… No era un aspecto importante para la historia. Lo único que nos importa es el resultado, ya que supone la culminación de la trama de la protagonista, una trama que nada tiene que ver con disparar rayos láser, viajar al espacio y moverse a velocidad de la luz.

La gente se quejó porque el trailer prometía ciencia ficción y al final no había nave espacial alguna, pero yo creo con todo mí ser de dragona que esa película es una de las más puras formas de ciencia ficción de los últimos años junto con La Llegada, aunque no haya cohetes ni batallas entre naves espaciales (que en La Llegada haberlas haylas, pero son casi anecdóticas). En ese momento se gestó un pequeño germen, que ha culminado en este artículo (que he dividido en dos partes, como hace Rika).

Este primero trata de los Viajes Espaciales y Temporales, temas muy recurrentes del género, para que podáis dilucidar un poco más dónde está el límite de la Sci-Fi. Nunca me he fiado de las temáticas, la verdad, pueden ser muy variadas y contener elementos futuristas todos los que quieras, pero aun así no ser ciencia ficción.

Antes de empezar voy a dejar este artículo por aquí: Qué es la Ciencia Ficción, de David Olier, en el que se detalla mucho más todo lo que os voy a contar en esta entrada. Tiene muchos otros artículos relacionados muy interesantes y que os recomiendo leer, como Clasificación de la Ciencia Ficción y los que tratan sobre Viajes Espaciales y Alimentación

Ahora sí, vayamos por partes.



¿Qué es la Ciencia Ficción?


La ciencia ficción es un género de ficción basado en (o que gira en torno a) hechos o logros científicos posible o imposibles para el tiempo y lugar del autor, y que podrían desarrollarse en el futuro. Es un género especulativo, que desarrolla las consecuencias y el influjo de dichos hechos o logros sobre la sociedad y/o el planeta. Su verosimilitud será mayor o menor dependiendo del nivel científico de las hipótesis expuestas en la historia. 

Y añado personalmente que la ciencia ficción se usa como una crítica a la sociedad en la que vive el autor. O, al menos, antes era uno de los principales objetivos. 

Dentro de la ciencia ficción podemos encontrar, en correlación con la verosimilitud y el rigor científico de cada historia, dos facetas, matices o subgéneros, llamados Ciencia Ficción Dura y Ciencia Ficción Blanda.

domingo, 12 de febrero de 2017

Worldbuilding con ejemplos: creando dioses.


¡Bienvenidos a la Mazmorra! ¡Frederika a vuestro servicio!

No voy a dar una clase de cuántas mitologías puedes rapiñar para incluir dioses en tu historia. Eso lo tendrás que hacer por tu cuenta, hincando codos, leyendo y tomando nota de cómo se adora a los dioses dependiendo de en qué época y sector del mundo viva una cultura. O acudiendo a blogs que lo hagan por ti, claro, que Internet está para eso. Yo, por mi parte, quiero tratar unas cuantas formas, no todas, que hay de construir dioses, que no religión (eso para otro artículo). Y para ello usaré algunos ejemplos; unos menos conocidos y otros seguro que más. Cabe resaltar que vamos a hablar de dioses mayores que tienen una influencia directa en los orígenes de la historia humana o de la raza que puebla el libro. Es decir, aquellos dioses a los que se adora y que definen la cultura.

Evidentemente, puede haber otros desconocidos, como todos esos libros donde los magos, los vampiros, las hadas y demás existen pero los humanos no lo saben. Ya que se podría discutir el papel de ese tipo de recursos y hasta poner en duda si llegan a ser dioses, no los incluiré en este artículo. Vamos a andar por un terreno más conocido sobre la cosmogonía y cómo influencia eso al mundo.

Cabe advertir que habrá ciertos SPOILERS por las novelas que vamos a tratar. Así que cuidado a los exploradores de la Mazmorra.


lunes, 6 de febrero de 2017

Análisis: Agencia Lockwood (II). El espejo perdido, Jonathan Stroud

Título: Agencia Lockwood (II). El espejo perdido.
Autor: Jonathan Stroud
Sinopsis: Hace seis meses Anthony, Lucy y George lograron sobrevivir a la casa encantada más aterradora de Inglaterra, pero la Agencia Lockwood aún tiene mucho trabajo por delante: los fantasmas y los sucesos misteriosos nunca se acaban. Además, siguen compitiendo contra los agentes de Fittes, que no deja de entrometerse en sus casos.
En esta ocasión, la Agencia es elegida para investigar la tumba de Edmund Bickerstaff, un siniestro doctor que en vida intentó comunicarse con el Más Allá. Una vez allí, todo va mal: un fantasma es liberado, una peligrosa reliquia desaparece del ataúd y, por si fueran pocos problemas, los tres agentes tienen que lidiar con una calavera parlante…
Editorial: Montena
Número de páginas: 489

«Tienes que leerlo» insiste Rick Riordan.

Querido Riordan, basta de mentiras. ¡No me obligues a lavarte la boca con jabón! Atte. Lyra.

Si leíste mi primera reseña sobre la Agencia Lockwood, sabrás que de antemano que no recomiendo este segundo libro. Y en esta reseña seguiré manteniendo esa postura. Sin embargo, me parece que empezar una trilogía y quedarse en el primer libro no es algo fácil. Después de leer Los Visitantes seguramente tendrás curiosidad por la continuación y nada de lo que yo te diga podrá quitarte ese gusanillo. De ser este tu caso, a pesar de la habitual parte sin spoilers, mi recomendación es que no leas nada a partir de aquí. Primero júzgalo tú mismo/a y luego vuelve a verme llorar [R: Lyra es tan buena que nos quita visitas].

¿Todo claro? Empecemos.