Recordatorio

No somos profesionales, simplemente nos gusta leer y tenemos tiempo libre, así que a veces cometemos errores.

jueves, 31 de mayo de 2018

De feminismo y personajes en general: la victimización de las mujeres


¡Bienvenidos a la Mazmorra! Soy Rika y esta vez vamos a hacer una suerte de extra en la serie de De feminismo y personajes femeninos/masculinos porque no sé bien dónde debería incluir este artículo. Por una vez cae una reflexión corta, al menos para los estándares de esta serie, y menos detallada. Quiero hablar de cómo las mujeres somos potenciales víctimas… Y cómo el ocio no duda en explotarlo como fetiche. 

Sé que parece evidente pero, como con todo, a veces las cosas evidentes hay que detallarlas un poquito para que seamos conscientes de ellas. 
No soy particular fan de la novela negra, pero de vez en cuando cualquiera tiene capricho y se sienta a leer un par de libros o, con más asiduidad, ve series o películas. No soy la excepción. Y siempre, siempre, siempre me fastidia una cosa: las víctimas casi son solo mujeres. Eso por no hablar de la negación a escribir sobre mujeres asesinas.

Ellas son la gran mayoría pesar de que, y no estoy entrando en el «20 hombres muertos por violencia de género», sabemos que hay muchos varones de todas las edades que mueren a manos de asesinos. O puede que no lo sepamos. Cuando hablé con mi señora madre sobre el tema, me miró con cara de pasmo y dijo así que ¿hay asesinos en serie de hombres? Me dieron ganas de arrancarme el sombrero y aplastarlo en el suelo. 

Nos hemos acostumbrado a que los asesinos en serie, da igual el formato, solo persigan mujeres. Los asesinatos de hombres parecen ser más casuales, quizá porque se interponían en su camino o porque estaban en el lugar menos adecuado. No es la regla, claro, pero sí lo más habitual. Al final se crea la sensación de que solo se persigue a las mujeres. Y eso es mentira. 

Jack el Destripador es de los favoritos para reimaginar asesinos con mujeres vulnerables

martes, 1 de mayo de 2018

De feminismo y personajes masculinos (II): Padres autoritarios


Bueno, bueno, bueno, hace mucho que no me paso por la Mazmorra pero no tenemos abandonado el sitio. De momento (?). ¡Bienvenidos a la Mazmorra! Soy Rika y vengo a hablaros de padres autoritarios desde un punto de vista feminista. Los que no sepáis de qué hablo, podéis echar un vistazo a este post para ver de qué van a ir más o menos los próximos artículos.

La verdad es que le he dado bastantes vueltas a este artículos. ¿Por dónde empezar cuando vas a hablar de hombres en la literatura? Hay muchas posibilidades, bastante más variadas que con mujeres. Los clichés están más diferenciados, los personajes (buenos) se disuelven más en el mar de referencias y hay más sitio para respirar antes de poner los ojos en blanco y pensar que ya has leído esto en otro sitio. Así que he optado por uno de los grupos más «minoritarios» en cuanto a que no son tan habituales o tan… numerosos. Al fin y al cabo, padre solo hay uno —y a las madres hay que matarlas, así que son todavía más relevantes por lo únicos que son—.

En concreto, vamos a hablar de padres autoritarios, porque lo que queremos es deconstruir un poco los personajes. Es difícil crearlos bien, es decir, reconociendo todos los terribles elementos misóginos, machistas y demases que suelen ir asociados a este tipo de figuras.


Y es que son el ejemplo clásico del patriarcado. Qué digo, son la figura del Patriarcado. El Dios de la tradición judeocristiana, el dios-padre prácticamente omnipresente de todas las grandes religiones politeístas (Zeus, Odín, Osiris… bueno Osiris no tanto porque acaba muerto muy pronto, pero os hacéis la idea), la figura del Papa o de los Patriarcas, el señor de la familia, el Presidente, el Gran Hermano. El padre es quien engendra y quien posee, por tanto, quien domina. El máximo reflejo del machismo, porque es quien lo crea, establece y enseña. Irónicamente, ese mismo sistema tiende a devorarlo porque llega alguno de sus hijos para ocupar su lugar. Con todo, su presencia marca para siempre a su descendencia.

No es muy habitual sentarnos a ver padres autoritarios jóvenes —que los puede haber. Generalmente la metamorfosis les da cuando tienen una niñita, tipo El rey león 2, pero se los nota más «blandos» y en proceso de aprender, así que no los incluiría en esta categoría. A menos que estén locos, un poco como el padre de Danny Torrance de El resplandor. Solo que ahí te dicen que es el hotel. Más o menos—, ya que la idea de padre es la de un hombre mayor, casi anciano. No suele ser el ejemplo ideal para convertirse en protagonista.

Sin embargo, a pesar de no ser el foco de la acción, hay muchas figuras de este estilo. Como no puede ser de otra forma, hablaré de Tywin Lannister, patriarca de una de las familias más disfuncionales de Canción de Hielo y Fuego —lo cual ya es decir—, Robert Baratheon y el padre de Sam Tarly. Pero también saltará Tritón de la Sirenita y su familiar lejano Zeus, en este caso de mano de Javier Negrete en Dioses del Olimpo.Entre otros perosnajes, claro.

¡Vamos allá!